Hace unos años, podía resultar todo un disparate abrir una heladería en invierno. Sin embargo, las tendencias en consumo sugieren que cada vez más personas toman helado como postre o merienda, independientemente de la época del año.
Los sabores del otoño se convierten en una auténtica delicia para el paladar de los más golosos. Los helados en invierno ofrecen otras alternativas que llaman la atención de los más curiosos, combinando productos y consiguiendo una mezcla de sabor que no podemos disfrutar en verano.
La explosión de ideas en el sector va mas allá de la elaboración de helados artesanales con sabores a frutas. Es por eso que, en este post, queremos compartir las mejores ideas que hemos encontrado.
Si vas a montar una heladería y estas buscando originalidad para tu negocio, no te pierdas estas recomendaciones.
Ideas para abrir un negocio de helados en invierno
Helado artesano y saludable
Los consumidores buscan marcas comprometidas con la alimentación saludable, lo que supone que, como heladeros, debemos actualizar nuestra oferta para elaborar productos que se adecúen a este nuevo estilo de vida y permitan su consumo de forma habitual.
Teniendo esto en cuenta, contamos con una serie de opciones que se pueden aplicar al negocio heladero para estar al día:
La primera de estas opciones es aumentar la oferta de productos “sin”, es decir, elaborar helados evitando el uso de aditivos, conservantes, colorantes o transgénicos. Son productos que pueden ser consumidos por todos desde edades muy tempranas, despertando el interés de los padres que buscan dar lo mejor a sus bebés.
Dentro de la gama infantil, se pueden incluir muchas alternativas para hacer destacar a nuestro producto. Los helados tipo yogurt con frutas naturales pueden ser una rica merienda que puedes comenzar a vender en formato “take a way”, ideales para llevar al parque, apostando por sencillas elaboraciones que conserven todos sus nutrientes.
El concepto que está teniendo mucho éxito en el sector de la alimentación, es el snacking, es decir, el formato “mini”. Ofrecer snacks en las heladerías, será una buena elección, ya que este formato invita a picar entre horas, pudiendo disfrutar de un dulce sin que resulte abusivo.
Las heladerías snacking suelen estar situadas en colegios, parques o actividades de ocio, muy recomendables por ser aún una idea de negocio emergente en España.
La línea de productos “bajo en azúcares” o “sin azúcares añadidos” es una excelente propuesta para fomentar el consumo de helado a cualquier hora del día y en cualquier estación del año.
Las tendencias heladeras se inclinan por la innovación y la elaboración de productos para alérgicos e intolerantes, con lo cual, es más que recomendable ofrecer una gama de helados apta para ellos, por ejemplo, helados para diabéticos o sin lactosa.
Otra opción puede ser incluir variedades percibidas como más sanas, por ejemplo, el helado con ingredientes de origen vegetal, aptas para veganos, como los elaborados con bebida de almendras, de soja, de avena, con leche de coco, entre muchas otras posibilidades.
Crear un producto exclusivo y que impacte
El objetivo es ofrecer un helado exclusivo y de sabores sorprendentes.
La calidad y el formato son importantes para conseguir desestacionalizar el consumo de helados artesanales, polos o yogurt helado, llenando esos huecos que ahora ocupan otro tipo de productos. Para ello, hay que presentar novedades en texturas y sabores, capaces de proporcionar nuevos y placenteros momentos de consumo.
A la hora de comer helados, el componente sensorial es fundamental, de modo que debemos buscar el placer del consumidor. El otoño viene acompañado de los denominados “sabores adultos”, que son helados con sabores más exóticos y amargos, elaborados a base de frutas y verduras, quesos o bebidas alcohólicas. Éstos son sabores poco habituales e implementarlos en tu carta puede suponer un punto muy positivo.
Interesante Información: Tengo en mente montar una empresa dedicado a la elaboración y venta de helados artesanales, de acá a 6 meses.